En algunos países como España, Italia, Colombia y buena parte de Latinoamérica, la ‘Semana Santa’ es más que un tiempo de vacaciones u otra de tantas celebraciones religiosas.
Son muchas las obras literarias, cinematográficas y documentales que han intentado capturar el dramatismo y solemnidad de las procesiones y rituales. Pero una de las más intrigantes e impresionantes representaciones de la Semana Santa está en un lugar inesperado: el videojuego Blasphemous.
Este juego independiente es obra del estudio español The Game Kitchen. Fue lanzado en 2019 y está claramente inspirado en títulos como Castlevania y Dark Souls. En nuestra reseña alabamos su misteriosa trama e impactante estilo visual. ‘Impactante’ es una palabra muy adecuada para la forma en que este juego reinterpreta de forma macabra las imágenes barrocas de la religión católica.
Los desarrolladores de Blasphemous tomaron la Semana Santa y la convirtieron en un mundo de terror. Para comenzar, solo hay que mirar a su protagonista: el Penitente. Su casco puntiagudo hace una clara referencia a los capirotes que usan los icónicos ‘encapuchados’ que procesionan durante estos días. Su espada es llamada ‘mea culpa’, una frase en latín que significa “mi culpa” y es usada en muchas oraciones.
Uno de los escenarios más icónicos del juego tiene una estatua a la que unos súbditos le están lavando los pies. Esta es una inversión de uno de los momentos más importantes de la liturgia: Jesús lavando los pies de sus discípulos.
Otro elemento del juego que recuerda a la Semana Santa son los puntos en que guardamos nuestra partida. Estos tienen la forma de los altares en que se expone la custodia con la comunión en representación del cuerpo de Cristo. Estas suelen exponerse todos los jueves del año, pero es una tradición importante visitar la custodia durante el Jueves Santo.
Curiosamente, estos altares del juego se llaman Prie-Dieu. Este nombre no pertenece a los altares con la comunión, sino a los muebles que se usan para arrodillarse a rezar, lo cual es lo que hace el protagonista para salvar su progreso. Otra curiosidad es que Custodia es el nombre del lugar en que se desarrolla el juego.
Muchos de los enemigos del juego también recuerdan a los participantes de las procesiones. Tenemos acólitos cargando estandartes o incensarios, bestias que llevan símbolos sagrados, y hombres con representaciones de la cruz a cuestas.
Como podéis daros cuenta, Blasphemous es una obra de arte muy interesante. No podemos evitar encontrar cierta admiración artística y cultural hacia esos mismos símbolos. De hecho, el juego va más allá e incluye referencias a otros elementos de la cultura española. En uno de sus escenarios podemos encontrar los arcos de la Mezquita de Córdoba, mientras que la banda sonora y los diálogos referencian la música flamenca.
Todo esto convierte a Blasphemous en el juego perfecto para jugar en Semana Santa. Podemos encontrarlo disponible para todas las plataformas.